Relación de los titulares del Señorío
1.- Diego Ramírez
Archivo Municipal de León (09-06-1335): “Gonzalo Pérez de Salamanca, juez por el Rey en la ciudad de León, en pleito entre Pedro Suárez, hijo de Diego Ramírez, señor que fue de Cembranos de una parte y Benito Pérez, procurador del Concejo de León de otra, falla que el lugar de Cembranos está dentro del alfoz y del término de la ciudad, que sus moradores hacen y toman derecho en la ciudad y que, en consecuencia, deben pagar los cáñamos que les fueran celados para la soldada del juez de salario de León”.
2.- Pedro Suárez (1335, junio 9, León)
3.- Juan Rodríguez de Escobar
Vecino y Regidor que fue de la ciudad de León.
4.- Elfa de la Torre (1394, marzo 27, León)
AHN, Depósito de marqués de Toca, nº 257 (Archivo Mercedes Gaibrois de Ballesteros): “Carta de doña Elfa de la Torre, mujer de frey Juan Rodríguez de Escobar, vecino y regidor que fue de la ciudad de León, vecina y moradora en León, vendiendo a doña Beatriz Ponce de León, el lugar de Cembranos, perteneciente a su difunto marido Juan Rodríguez. Dicho lugar se lo había legado Juan Rodríguez Escobar a doña Elfa por los 30.000 mrs de sus arras. Entre los testigos figuran Juan de Belmonte y otros hombres de doña Elfa, y Yuçaf, moro criado de doña Beatriz, vecinos de León”.
5.- Beatriz Ponce de León (1352 – ?)
Doña Beatriz. Beatriz Ponce de León y Jérica fue una de las amantes del rey Enrique II de Castilla. De su relación con el rey Enrique nacieron dos hijos: Beatriz de Castilla y Ponce de León y su hermano Fadrique de Castilla y Ponce de León (1360-1394).
Éste último fue nombrado por su padre duque de Benavente. Murió en prisión en Almodóvar del Río en 1394. Fadrique de Castilla mantuvo una relación amorosa con Leonor Sánchez de Castilla, fruto de dicha relación nació una hija:
6.- Leonor de Castilla y Alburquerque (1393 – 1470)
Hereda el señorío de su abuela Beatriz Ponce de León, ya que su padre Don Fadrique había fallecido cuando ella contaba un año de edad. Contrajo matrimonio con Pedro Manrique de Lara y Mendoza, VIII señor de Amusco y Treviño y Adelantado mayor de Castilla. Después de enviudar profesó como religiosa en el monasterio de la Consolación de Calabazanos, fundado por ella y en el que fue sepultada. Fruto de su matrimonio nacieron quince hijos:
7.- Gómez Manrique (1412 – 1490)
Cuarto hijo varón del matrimonio formado por Pedro Manrique, VIII señor de Amusco, y Leonor de Castilla, nació en Amusco en 1412. Gómez Manrique hombre de armas y letras, pues las primeras, como declara en la introducción a su cancionero “demás de lo haber mamado en la leche, ya desde mi mocedad en el escuela de uno de los más famosos maestros que, como vuestra merced bien sabe, hubo en nuestros tiempos, que fue mi señor e mi hermano don Rodrigo Manrique, maestre de Santiago, digno de loable memoria”; y para las segundas, contó con el magisterio de Garçi Fernandes del Castillo, al que Leonor llama “maestro de mis hijos”, y con el de su tío, Íñigo López de Mendoza, marqués de Santillana, quien despertó su vocación poética.
Su actividad marcial y política estuvo ligada durante los desastrosos reinados de Juan II y Enrique IV a los avatares que sufrió su levantisca familia, opuesta a la política de ambos Reyes y sus validos. Junto a Rodrigo, conquistó Huéscar a los árabes el 6 de noviembre de 1434, según relata Pedro Carrillo de Huete.
Participó en las conversaciones de Tordesillas de 1439, que concluyeron con el destierro temporal de Álvaro de Luna. Desde principios de 1440 acompañó, junto a Rodrigo Manrique, al infante Enrique de Aragón por Toledo. Desde allí, se dirigieron a Valladolid para recibir a la princesa Blanca de Navarra, prometida del infante, futuro Enrique IV. Sin embargo, estas bodas se tiñeron de luto para la familia Manrique, pues en la noche del miércoles 21 de septiembre de 1440 murió el adelantado Pedro Manrique. En su testamento, fundó mayorazgo para su hijo Gómez, pasando a titularse señor de Villazopeque, Belbimbre y Matanza, más tarde, en virtud de los acuerdos con sus vecinos, también de Cordovilla.
Continuó en el ejército de Enrique de Aragón, maestre de Santiago, hasta la muerte de éste en Calatayud, a consecuencia de la herida recibida en la batalla de Olmedo en 1445. Muerto el infante, Rodrigo se autoproclamó maestre de Santiago frente a Álvaro de Luna.
Con la llegada de Enrique IV al poder en 1454, Gómez Manrique fue nombrado corregidor de Salamanca, cargo en el que permaneció hasta finales de 1457. Participó en la campaña guerrera de 1458 por Andalucía, recorriendo las comarcas de Baza y Guadix.